La CIDH Ordena A Peña Proteger La Vida E Integridad Personal De La Activista Bettina Cruz
«Defender nuestra tierra ha sido difícil».
Ciudad de México, (23 de Enero del 2018).- La Comisión Interamericana de Derechos Humanos ordenó al presidente Enrique Peña Nieto proteger la vida e integridad personal de Bettina Cruz y su núcleo familiar, esto al acreditarse la situación de riesgo en la que la activista se encuentra por el trabajo que realiza en defensa de los derechos de los pueblos indígenas.
La decisión que la CIDH tomó se fundamenta en la incansable lucha del pueblo zapoteco frente a la imposición del proyecto Eólica del Sur en Juchitán, que antes se pretendía instalar en el pueblo de San Dionisio del Mar como consorcio Mareña Renovables, pero no lo consiguió.
En Oaxaca existen más de 21 parques eólicos en funcionamiento, cuya instalación ha ocasionado el despojo de tierras y la alteración de las formas de subsistencia, costumbres y creencias de las comunidades indígenas, desde los años 90.
Bettina Cruz ha llevado con un gran éxito ante la Organización de las Naciones Unidas y el Banco Interamericano de Desarrollo los reclamos de los pueblos zapotecos acerca de la falta de respeto y de las garantías de derechos humanos, por parte del gobierno de México, y de las empresas que se encuentran involucradas en estos proyectos.
La directora de la Clínica de Derechos Humanos de la Universidad de Washington, Alejandra Gonza, quien es representante de Bettina Cruz, señaló que la orden de la CIDH es una fuerte advertencia y a la vez una oportunidad para que el Estado y el sector privado finalmente tomen en serio el trabajo que se realiza en pro de la defensa territorial indígena y de una vez por todas que cumplan con sus obligaciones internacionales.
La decisión de la CIDH se suma a la resolución histórica de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, emitida hace unos días, con la que ejerció su facultad de atracción para conocer este caso.
Los pueblos indígenas representados por Bettina Cruz denunciaron ante el máximo tribunal del país la ausencia de una consulta libre, previa e informada en la construcción del proyecto Eólica del Sur.
Ahora la SCJN podría fijar un importante precedente para la defensa de los derechos de los indígenas, determinar el contenido de las obligaciones que tienen las empresas y las distintas dependencias del Estado en materia de derechos humanos, y establecer los estándares de derechos humanos que los proyectos derivados de la Reforma Energética deben cumplir.
De acuerdo con Bettina Cruz, con la aprobación de una reforma energética en México, además de la declaratoria de Oaxaca como Zona Económica Especial y la militarización de la región, el Estado privilegia proyectos energéticos frente a los derechos humanos.
“Defender nuestra tierra ha sido difícil. Cada vez que presentamos un recurso nacional o internacional, nuestra vida y la de nuestras comunidades corre peligro. Cada vez que lo ganamos, el riesgo aumenta. Y lo que se torna inaceptable es que, a pesar de contar en distintos momentos con decisiones claras sobre el riesgo social y ambiental del proyecto y la violación al derecho a la consulta a nuestras comunidades, el gobierno y las empresas siguen desarrollándolo sin vergüenza”, apuntó.
Ricardo Lagunes Gasca, abogado de las comunidades en México, remarcó que en el contexto de violencia, amenazas y constantes violaciones a los derechos humanos que se vive en Oaxaca, la CIDH es la única esperanza para visibilizar la situación de los defensores de los derechos humanos y las comunidades a las que representan.
Ya se han presentado hechos de intimidación, por lo que Rodrigo Peñaloza, esposo de Bettina y miembro de la Asamblea de Pueblos Indígenas del Istmo en Defensa de la Tierra y el Territorio, ha denunciado a nivel nacional e internacional la presencia de personas fuertemente armadas alrededor de su domicilio.
Con Información de Proceso.