Anaya Y Meade Reniegan Hoy Por El Fiasco De Reforma Energética, Pero Ellos Son Sus Padres: Nahle
Es Insultante para la inteligencia de los mexicanos.
Ciudad de México, (12 de Febrero del 2018).- Era 20 de diciembre de 2013, se había aprobado ya la Reforma Energética y el panista Ricardo Anaya Cortés, entonces presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, subió al estrado para hablar del logro que significaba que fuerzas contrarias se pusieran de acuerdo en el Congreso de la Unión para aprobar las reformas que fueron postergadas por décadas.
Cuatro años después, el hoy como abanderado de una coalición entre el PAN, PRD y Movimiento Ciudadano, enfrenta la realidad: protestas ciudadanas por el incremento del precio de los combustibles y el alza del costo de la canasta básica en los primeros días de 2018.
Lo mismo ocurre con José Antonio Meade Kuribreña, precandidato del PRI y sus aliados, a quien el dirigente del PAN, el partido que aprobó la Reforma Energética junto con los priistas, ha llamado: “el padre del gasolinazo”.
Para Rocío Nahle García, coordinadora de la bancada del partido Morena en San Lázaro y probable Secretaria de Energía de ganar Andrés Manuel López Obrador las elecciones del próximo 01 de Julio, lo que sucede entre ambos partidos es “insultante para la inteligencia de los mexicanos”.
Morena era entonces apenas un movimiento que aspiraba a ser partido cuando se aprobó la Reforma Energética y vivió horas de agitación durante las protestas alrededor del Senado de la República y la Cámara de Diputados.
“No pueden engañar a la gente. Toda la gente en México lo sabe. Es un insulto a la inteligencia. Sólo hay que irse a la historia de hace cuatro años: ahí está la votación. La aprobaron un 12 de diciembre de 2013 y al año se llevaron a cabo las reformas a 21 leyes secundarias. No pueden deslindarse de algo de lo que hay evidencias”, argumentó Nahle García.
La legisladora recordó las promesas fallidas, las proyecciones “demasiado optimistas” a las que Morena, como movimiento apenas, se negó.
“Nosotros dijimos que estaban abriendo mal el sector, que se tenían que ir con tiento. Se temía que valorar a la hora de las licitaciones, hacerlo por partes, ir viendo resultados y conforme fuéramos teniendo éxito, replicar. No podemos decir que no, pero lo hicieron todo mal”, dijo.
Con Información de SinEmbargo.