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5 mitos y realidades de la historia de México, parte II

Continuando con esta lista de los mitos más grandes de la historia de México, en esta ocasión, nos concentramos en la historia intermedia de nuestro país: la llegada de los franceses y las verdades de dos personajes polarizados para siempre: Juárez y Porfirio Díaz. Ésta es la verdad.

1810: El comienzo de la lucha por la independencia

Muchos mexicanos creen que con el grito de Dolores en la madrugada del 16 de septiembre de 1810 por parte de papi Hidalgo y Costilla, obtuvimos la independencia de los gachupines. Realmente fue hasta el año de 1821 cuando finalmente se consumó la lucha. Hidalgo duró menos de lo que dura un noviazgo hoy en día, ya que para julio de 1811, fue fusilado. Así que en realidad, los hombres que se la rifaron el resto del tiempo fueron Morelos, Vicente Guerrero y Agustín de Iturbide. Estos dos últimos le pusieron punto final a la guerra aunque Iturbide sea satanizado increíblemente por la historia de México así como lo ha hecho con otros personajes que veremos a continuación.

5 de mayo: Victoria a medias

El 5 de mayo de 1862 es bien recordado por la gloriosa y extraordinaria victoria que el ejército mexicano obtuvo contra los francés, por el show del telegrama de Zaragoza a Juárez “Las Armas se han cubierto de gloria”, y también porque los 5 de mayo no se trabaja. El caso es que si bien las fuerzas de Zaragoza derrotaron contundentemente a las de Napoleón III ese día, sus tropas no tuvieron piedad en los siguientes enfrentamientos. Se tardaron pero terminaron por tomar la capital del país en junio de 1863 y se mantuvieron ahí hasta 1867 cuando fue fusilado Maximiliano. ¿Esa no te la sabías verdad?

5 de mayo: Díaz, el verdadero héroe

Antes de que todos se rasguen las vestiduras por el retiro del General Zaragoza de los billetes de 500 pesos, deben saber que en plena batalla, el general mexicano se encontraba en su lecho enfermo de gravedad. ¿Quién le entró a los guamazos? Pues Porfirio Díaz, de quien todos hablan pestes por culpa de los libros de historia. El 5 de mayo Porfirio desobedeció las ordenes de Zaragoza de no atacar aún a los franceses. El bigotón de hierro hizo caso omiso y rompió el sitio de los franceses. ¿A quién creen que se deben en gran parte la victoria? No sólo eso, sino que Díaz, al frente de sus hombres tras la muerte de Zaragoza en el mismo 1862, continuó peleando contra los invasores, llevándose muchas derrotas pero finalmente los expulsó del país en 1867, entregándole a Juárez la ciudad de México, libre, sana y salva. ¿Ya cambió tu percepción de Porfirio?

Juárez: Presidente de mentiras

Los libros de historia no canonizan a Juárez nada más que porque éste estaba en contra de la iglesia, mientras a Don Porfirio lo acusan de que se reelegía, pero Juárez no cantaba mal las rancheras. Resulta que el oaxaqueño se convirtió en Presidente por primera vez en 1858 tras la renuncia del Presidente Comonfort, ya que él era Presidente de la Suprema Corte. A partir de ahí, siguió la guerra de reforma que duró tres años y luego la intervención francesa que culminó en 1867, cuando hubo nuevamente elecciones y Juárez ganó por primera vez unos comicios. Es decir, que casi 10 años Juárez fue un presidente tipo López Obrador, al tiempo que huía por todo el país de sus enemigos. Se reeligió nuevamente en 1871 en otro mar de dudas por fraude electoral, y solo la muerte lo quitó del poder en 1872, cumpliendo 15 años como “Presidente”.

La Revolución: Muchas en una

Popularmente se cree que la revolución mexicana fue una guerra para derrocar a Porfirio Díaz, y que Madero, Zapata, Villa, Carranza, Obregón y Felipe Ángeles unieron esfuerzos para acabar con el bigotón de hierro. Pero la realidad es que la revolución mexicana fue una serie de guerrillas entre 1910 y 1923. Porfirio Díaz fue derrotado apenas en 1911 y de ahí siguió una letanía de traiciones, asesinatos y luchas por el poder entre los personajes antes mencionados. Fue de esas épocas en las que un presidente duraba menos que el recreo en la primaria. El récord es del “Presidente” Pedro Lazcuaráin, quien duró 45 minutos para dar paso a Victoriano Huerta tras el asesinato de Madero.

Conclusión: Como podemos ver, nos cuentan verdades a medias en la primara, y quizá eso sea para producir el sentimiento de patriotismo entre los niños. Sin embargo, lo que no es válido es ensalzar y endiosar a algunos personajes para desprestigiar a otros. Al final, todos querían el mejor México a su forma de pensar. O todos coludos, o todos rabones.

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